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BASF presenta un ERTE para su centro de producción de Rubí y asegura el 85% del salario de la plantilla

La afectación del Covid-19 a segmentos como la automoción o la construcción ha supuesto esta medida, necesaria para asegurar los empleos del site 

La producción del centro de BASF en Rubí se ha visto profundamente afectada por el Coronavirus. El impacto de este sobre los negocios para los que opera el site ha llevado a tomar la decisión, acordada con la comisión negociadora y sindicatos, de presentar un expediente de regulación de empleo temporal. BASF asegurará que los trabajadores afectados por el ERTE perciban un complemento de hasta el 85% del salario y mantendrá íntegros los beneficios sociales. Este expediente de regulación temporal es una medida imprescindible para superar esta situación extraordinaria, que ha afectado gravemente a segmentos como los de la automoción o la construcción, estratégicos para el site.

 

El expediente incluye a 63 empleados de todos los departamentos del centro de BASF Española en Rubí. El paro de las plantas del centro de producción no será total, pues se mantendrá un cierto nivel de actividad. La empresa está convencida que esta medida es necesaria para asegurar los empleos del site. 

 

La prioridad de BASF es la protección de las personas, tanto dentro como fuera de los centros de producción. Todas las decisiones se toman con esta premisa por encima de cualquier otra. Desde el inicio de la crisis del Covid-19, la compañía ha activado un paquete de medidas para frenar la propagación del virus, y proteger a las personas. Medidas que van desde la implantación del teletrabajo, la restricción de movimientos o el incremento de las medidas de higiene, entre otras. Además de las acciones internas, este compromiso se ha traducido también en transformar nuestra producción para ayudar a la lucha contra el Covid-19. Adaptamos nuestros procesos de fabricación para producir más de diez toneladas de gel desinfectante, que hemos donado al sistema sanitario. Por otro lado, con una donación de producto a la administración, hemos ayudado a fabricar 20 toneladas de desinfectante para superficies. Y, además, estamos aprovechando nuestra experiencia en el sector de la impresión 3D y sus materiales para crear y donar piezas para su uso en el sector sanitario local.